Durante este tiempo, que suele durar entre 40-42 semanas, la mujer debe adaptarse a una serie de cambios físicos y emocionales y prestar especial atención en sus cuidados personales y alimenticios. Pasada la semana 37 de gestación, el parto se puede producir en cualquier momento.
Estos son algunos cambios físicos que puedes presentar durante el embarazo:
Primer trimestre.
- Cambios de humor.
- Cansancio y sueño.
- Náuseas, mareos y vómito.
- Aumento del tamaño del útero.
- Sensibilidad de los senos y aumento de volumen.
- Los pezones se tornan más oscuros.
- Ausencia de menstruación.
- Aumento de peso.
Segundo trimestre.
- Los senos (en algunos casos) segregan calostro un líquido amarillento.
- Continúa el aumento de peso. (Se aumenta cerca de 4 kilos de peso).
- Se notan las primeras señales de los movimientos del feto.
- Aparece la línea alba debajo del centro del abdomen.
- Aparece el cloasma o máscara del embarazo.
- Pueden surgir molestias físicas como ardor de estómago o congestión nasal.
- Se tienen sentimientos positivos y una sensación de fortaleza.
- La madre sueña con su futuro hijo.
Tercer trimestre.
- Ganas de orinar frecuentemente.
- Aumento de transpiración.
- Dolores de espalda.
- Continua el aumento de peso (entre 3 y 5 kilos de peso).
- Cansancio.
- Contracciones uterinas de Braxton-Hicks.
- Preocupación y temor ante la llegada del parto.
Cuidados durante el embarazo.
- Asistir al control prenatal una vez al mes.
- Realizarse los exámenes de control cada trimestre.
- Control estricto de la tensión arterial.
- Dieta saludable
- Eliminación de sustancias toxicas.
- Evitar la automedicación.
- Realizar ejercicio.
